Por: Erick Camargo (Corresponsal OEP)
Para Observatorio de Ecología Política de Venezuela
Las lluvias han vuelto a Caracas, sin embargo en varios sitios de la ciudad los vecinos alertan del enorme riesgo que existe en ver la ciudad a merced de las aguas. En varios puntos de la ciudad hemos conversado con dirigentes vecinales sobre la situación de los drenajes urbanos y como estos funcionan a modo de papelera.
Y es que desde Antimano, con José Gregorio Ochoa, el centro de Caracas con Carlos Rojas, en Petare con Ingrid Palacios y Alexis Cordero; nos hemos topado con quejas constantes sobre la enorme cantidad de desechos sólidos que abundan en el alcantarillado de la ciudad que funciona como drenaje para el suelo urbano durante las lluvias.
Cada vez que llueve podemos observar en cualquier punto de la ciudad cómo las calles se inundan, cómo los desechos sólidos flotan en las lagunas de las calles, o son arrastrados por las corrientes de agua que se observan en las calles de los distintos sectores de la ciudad. Entre los vecinos de la ciudad se pueden observar molestias por la falta de mantenimiento de dichos colectores de agua, pero también recogemos el llamado de atención de José Gregorio Ochoa, quien declaró “También nosotros debemos poner de nuestra parte, tener un uso más consciente de las cosas y no echar tanta basura por allí”.
En Petare, la ex concejal Ingrid Palacios ha reiterado la necesidad de establecer un centro de alerta temprana en Baloa, el cual monitoree los niveles de agua del río, el cual debido a la falta de dragado desde Petare hasta El Encantado, presenta importantes niveles de represamiento que se agrava con las lluvias.
Ingrid Palacios comentó que “cada año hemos visto que el río sube más allá del nivel producto de la falta de dragado; muchos desperdicios se acumulan en el curso del río, además de los sedimentos que forman islas y playas; es urgente el dragado y el centro que alerte a las autoridades y vecinos a tiempo para evitar tragedias”.