Hoy estamos conversando con la profesora Beatriz Vera, hasta hace poco Coordinadora del Centro de Botánica Tropical, Instituto de Biología Experimental de la Universidad Central de Venezuela, donde estuvo desde febrero del 2015. Posee una extensa experiencia como coordinadora en diferentes centros de investigación de la universidad y es miembro del comité académico el posgrado de botánica en dicha casa de estudios. Tiene en su haber unas 26 publicaciones científicas orientadas a la botánica y especialmente a la botánica marina; así como ha trabajado en 7 publicaciones de divulgación científica enfocada en la biología marina. Además, ha participado en 6 proyectos de investigación, dicta 4 cursos de biología marina en la UCV, pese a la precariedad económica de los docentes universitarios; pero también ha colaborado en un informe científico sobre uno de los temas que vamos a tratar a continuación con ella, para comprender algunos de los problemas ecológicos de las costas venezolanas.
Buenos días, profesora, gracias por atendernos, empezaríamos por preguntarle precisamente ¿Cuáles son los problemas ecológicos y ambientales, además de los ya conocidos derrames petroleros, que se ven en las costas venezolanas?
En nuestras costas existen múltiples problemas como son las introducciones de especies exóticas, ya sea intencional o accidentalmente.
Introducción de especies de forma intencional ¿Cómo es eso profesora?
Con respecto a las introducciones intencionales con propósito de cultivo, se introdujo en las costas de Sucre, al norte de Araya un alga llamada Kappaphycus alvaresii, la cual ha sido documentada desde 1991 hasta el presente por el ficólogo Jorge Barrios del Instituto Oceanográfico de la UDO de Cumaná. Esta alga ha venido desplazando los corales en la isla de Margarita, y en Cubagua donde también fue introducida.
¿Por qué fue introducida esta especie? ¿No se conocía su capacidad para desplazar al coral?
Esta alga es productora de carragenina que es un producto muy utilizado en la industria alimenticia y tiene un alto costo en las importaciones a nivel mundial. El problema se presenta porque es un alga que se desarrolla controladamente en Filipinas porque allá las aguas son oligotróficas, es decir, con pocos nutrientes, mientras que aquí las aguas son muy ricas en nutrientes, debido al fenómeno de surgencia costera (Upwelling) originada por los Vientos alisios, además de los aportes nutritivos del Río Orinoco y el Río Amazonas. A todo esto hay que agregar el manejo inadecuado de los cultivadores que no utilizan redes de encierre, sino cuerdas e nylon para el cultivo, con flotadores inadecuados y cuando se producen marejadas, las algas se desprenden y riegan por toda la zona. Los tallos caen sobre los corales y los asfixian.
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¿Cómo se puede abordar la problemática?
Se ha discutido durante todos estos años la necesidad de una legislación para que se puedan realizar los cultivos, como en otros países, sin que hasta la fecha esto se haya logrado. Las causas son múltiples, pero, privan los intereses económicos, sobre los ecológicos.
Entonces hay un trasfondo económico en ello.
Efectivamente. Pero este no es el único caso de especies introducidas que están afectando los ecosistemas costeros de Venezuela.
¿Qué otra especie está generando problemas?
La introducción de un coral blando llamado Unomia stolonifera es otro problema muy grave en nuestras costas, debido a lo agresivo que es y su poder de colonización. Se introdujo en el 2007 y no se ha realizado el control de esta especie que está creciendo no solo sobre los corales, sino sobre pastos marinos, rocas, arena y cualquier superficie, siendo hasta ahora el invasor más peligroso para la biodiversidad del Mar Caribe. Al respecto, las Dras. Estrella Villamizar y Jeannette Pérez del IZET-UCV se han dedicado a la investigación de este coral invasor, con el fin de buscar un control. En la UDO también existen investigadores que están haciendo el seguimiento y posibilidades de control de este.

La introducción de este coral fue de forma intencional, mediante introducción deliberada de un acuarísta, para ser cultivado y vendido. El acuarísta lo introdujo en aguas del Parque Nacional Mochima, sin conocimiento de las autoridades y en la actualidad se hace un esfuerzo para tratar de controlarlo, pese a que ya está distribuido en toda nuestra costa y ocasionará problemas de invasión en el área marina de otros países. La especie proviene del indo-pacífico y ha crecido invadiendo todo el ecosistema marino de nuestra costa, eliminando comunidades de corales, pastos marinos y bancos de macroalgas. Existen actualmente varios proyectos aprobados para el control de la Unomia stolonifera, los cuales se vienen haciendo en conjunto entre la UCV y el Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas (IVIC).
Bastante grave esta situación
Muy preocupante en verdad. Además, los continuos derrames de petróleo en nuestras costas han contribuido con la eliminación de la biota marina y lacustre, como la del Lago de Maracaibo.
Recientemente, se añade otro problema de invasión de las algas de arribazón del género Sargassum, el cual desde 2012 viene llegando a las costas de Macuro, estado Sucre, sin que se hubieran hecho las denuncias respectivas.
¿Por qué no se realizaron las denuncias por el caso del Sargassum?
Esto fue debido a que hasta ahora las cantidades han sido manejables, a diferencia de México, República Dominicana y otras áreas del Caribe, donde recientemente de habla de más de 30 toneladas de Sargassum provenientes del Mar de los Sargazos y más recientemente de las costas africanas. Estas algas también se han observado en Cubagua y hasta el momento no han sido evaluadas. Pero es importante tener los registros y volúmenes en que se encuentran en nuestras costas. También es importante determinar su procedencia.
¿Este no es un caso de introducción voluntaria por humanos, sino natural?
Sí, estas llegan de forma natral, pero proliferan en nuestras aguas al conseguir nutrientes producto de las descargas de aguas residuales en los mares; así que la influencia humana tiene que ver de forma directa en su adaptación a estos ecosistemas.
¿Existen casos de introducción involuntaria o accidental?
Si, también hay casos de ese tipo. Como un ejemplo de introducciones accidentales o sin causa conocida podemos citar el alga Ulva reticulata, que se piensa entró por agua de lastre, al igual que un pasto marino llamado Halophila stipulacea.
¿Qué tarea tienen las autoridades nacionales en esto? ¿Las vienen cumpliendo?
Día a día, aumentan los problemas ambientales con la consecuente pérdida de diversidad, sin que el gobierno y las autoridades estatales tomen en serio esta problemática y den soluciones eficientes en conjunto con los científicos del país.
Muchas gracias a la profesora Beatriz por su información.
A la orden, es importante tener el conocimiento sobre la situación ecológica de nuestros mares y su problemática ambiental, así como nuestra actividad y acciones, sin la información requerida, provocan daños en los ecosistemas marinos. Es necesario y que las autoridades se avoquen a crear un marco regulatorio para evitar la introducción de nuevas especies y controlar las llamadas invasoras que ya se encuentran en nuestros ecosistemas; así como se dediquen a cumplir con sus responsabilidades de mantener un medio ambiente sano y atender esta problemática, con ayuda de las personas calificadas y que entienden bien la situación, como los científicos e investigadores.