Como parte de la labor de seguimiento de los problemas y conflictos socioambientales en el país, el Observatorio de Ecología Política de Venezuela ha recopilado a continuación algunas de las problemáticas socioambientales reportadas durante el mes de noviembre de 2025.
Incendios en el Complejo Petroquímico de Anzoátegui
Entre las noticias más destacables en materia socioambiental registradas en el mes noviembre, está la que refiere al devastador incendio ocurrido en las áreas de almacenamiento de coque y azufre de las empresas Petrocedeño y Roraima, ubicadas en el Complejo Petroquímico de José Antonio Anzoátegui.
Este incendio provocó la liberación de una nube de humo tóxico que afectó a los residentes en la parroquia El Pilar, en Anzoátegui. El siniestro, que fue reportado desde del jueves 6 de noviembre, dejó al menos 40 personas con afecciones respiratorias y una mujer fallecida, según indicaron algunas noticias sobre este suceso.
El origen del incendio se produjo en los depósitos de dióxido de azufre, lo cual generó una columna de humo que se extendió sobre zonas residenciales. Las autoridades locales indicaron el desalojo de escuelas y viviendas, comunidades.
La Alcaldía de Lechería junto a Protección civil emitieron recomendaciones inmediatas para la población expuesta: permanecer en interiores con ventanas y puertas selladas, utilizar paños húmedos para cubrir nariz y boca, y monitorear síntomas como tos persistente o dificultad para respirar.
En redes sociales la Asociación Civil Gente del Petróleo enfatizó ante este siniestro la «urgente necesidad de reforzar políticas de prevención, higiene y seguridad industrial» en la zona, recordando que este tipo de accidentes recurrentes ponen en riesgo la vida de los ciudadanos y el medio ambiente.
Posterior a ese accidente, se produjo otro incendio en el mismo Complejo Petroquímico de Anzoátegui el 19 de noviembre. Esta vez no se registraron ni heridos ni personas afectadas por este siniestro. PDVSA indicó que daba inicio a una investigación para así descartar sabotaje.
Eventos climáticos afectan la siembra de maíz
Las fuertes precipitaciones registradas en meses anteriores, especialmente durante el trimestre de mayo a julio, han impactado el sector agrícola. En el estado Portuguesa hubo una reducción de un 50% de la siembra de maíz. De acuerdo a un reportaje del medio El Cotejo, el gobernador de Portuguesa, Primitivo Cedeño, señalaba que esta situación se debía a eventos climáticos como las lluvias torrenciales que no habían podido permitir sembrar todas las áreas previstas para el cultivo de maíz en esa entidad.
De igual manera, el presidente de la Asociación de Productores Rurales del Estado Portuguesa (Asoportuguesa), Gustavo Moreno, también confirmaba esta situación, que implica la reducción a la mitad de la siembra de este grano.
Este episodio climático reaviva preocupaciones sobre la vulnerabilidad del agro venezolano ante el cambio climático.
Ver también: Resumen mensual de problemas socioambientales en Venezuela (1- 31 de octubre)
La crisis del agua en Ciudad Guayana y Distrito Capital
Durante el mes de noviembre también registraron noticias referidas a problemas en el suministro del agua en Ciudad Guayana, estado Bolívar, y en el hospital José María Vargas, en Distrito Capital.
Según un reportaje en Ciudad Guayana, los habitantes han reestructurado sus horarios para ajustarse a los racionamientos estrictos de agua, que afectan las parroquias como Cachamay, Universidad y gran parte de Unare. Las entregas se limitan a breves periodos —alrededor de 15 minutos por la mañana y la noche, más media hora al mediodía, lo que obliga a los habitantes de estas zonas a priorizar tareas como el aseo personal y la limpieza del hogar en esos lapsos reducidos.
En paralelo, el Hospital José María Vargas, en la parroquia San José del municipio Libertador, en Caracas, persiste el problema del agua. Según reportaje, la provisión intermitente de agua agota rápidamente los tanques de agua, forzando así a familiares de pacientes a acarrear botellas plásticas y garrafones de 20 litros desde sus residencias o comprarlos en farmacias cercanas, incrementando gastos en un momento de vulnerabilidad. Los baños también presentan severos problemas de higienes, debido a la falta de agua.