Tras dos semanas de agitadas negociaciones, concluyó hace días atrás la Conferencia de Bonn sobre el Cambio Climático, una de las reuniones previas que abre camino a la próxima Conferencia de las Partes de la Convención Marco sobre el Cambio Climático de Naciones Unidas (COP28).
En Bonn, la participación de representantes del lobby petrolero y de otros sectores contaminantes entorpecieron el proceso de acuerdos necesarios para enfrentar la crisis climática. Como es usual en el seno de estas conferencias, los intereses económicos de estos sectores casi siempre se anteponen y se terminan postergando las medidas urgentes que amerita para frenar la contaminación generada por la industria petrolera. Al parecer, los reiterados llamados de la comunidad científica a tomar acciones inmediatas son pasados por debajo de la mesa en estas negociaciones.
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Conociendo el poder que ejercen las industrias fósiles, para la COP28 que se celebrará en Dubai, se solicitará a todas las personas que se inscriban en la misma, indicar su relación o afiliación con el lobby de las industrias de gas y petróleo. Esto ha sido posible gracias a la presión y lucha de años de activistas que han solicitado mayor transparencia en estas negociaciones. Por otra parte, la Campaña global para exigir justicia climática denunció que en Bonn, el lobby petrolero, lo que ha impulsado son falsas soluciones para así seguir dilatando el uso de energías fósiles.
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Mitigación una piedra de tranca
Uno de los puntos más conflictivos ha sido el tema de mitigación, tanto así que el tema de los Programas de Trabajo de Mitigación se ha excluido de la agenda oficial de la próxima COP 28. Hubo un enfrentamiento entre países de Norte y Sur Global sobre el tema de financiamiento y presión por parte de países como Arabia Saudí, Bolivia, China y Venezuela, que tampoco permitieron un consenso sobre la inclusión formal del programa de Trabajo de Mitigación. Esto, sin duda, frena el avance para que los países asuman un compromiso para la reducción de emisiones y fijen fecha para finalizar la producción de combustibles fósiles.
Postergando medidas necesarias
La pugna entre países y los intereses económicos nos hacen prever una COP 28 bastante conflictiva, lo cual no es nada esperanzador dado que estamos a contrarreloj para enfrentar la crisis climática. Incluso, la conocida activista Greta Thunberg, señaló que las decisiones que se tomen o se dejen de tomar implicarán una sentencia de muerte para la humanidad.
Otro contradictorio en sí mismo es que la sede de la COP 28, será en Dubai, Emiratos Árabes y será presidida por el sultán Ahmed Al-Jaber, quien es el director ejecutivo de una de las más importantes empresas petroleras del mundo. En tal sentido, hay un evidente conflicto de intereses que no permitirá el avance necesario que permita reducir la producción de combustibles fósiles.
Mientras tanto, en Latinoamérica distintas organizaciones seguimos luchando por soluciones reales que den cuenta a transiciones energéticas que no escondan caballos de Troya y respondan a los intereses de los pueblos y de la naturaleza.
Buenas tardes, mi nombre es Alma Rivero, soy periodista y escribo un reportaje para https://climatetrackerlatam.org/ y me gustaría contactar con el departamento de prensa, respecto a un fuente oficial requerida. Agradezco de antemano todo el apoyo que pueda ofrecerme.
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