Este sábado 24 de febrero estuvimos en Nueva Casarapa compartiendo con la comunidad un conversatorio sobre el Manual de Herramientas Jurídico-Ambientales para Comunidades y Activistas, desarrollado por el Observatorio de Ecología Política de Venezuela. El evento, organizado por el movimiento vecinal Muévete Casarapa, contó con una nutrida participación de vecinos y vecinas interesados en conocer las herramientas legales disponibles para la defensa del medio ambiente.

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Además de presentar la propuesta para la realización de un seminario popular sobre derecho ambiental, enmarcado en el Manual, se discutieron los principales problemas socio-ambientales que viven los habitantes de Nueva Casarapa y de Guarenas en general, donde se reseñó con especial preocupación la constante quema de basuras realizadas en diversos sectores de la ciudad y que cubre con nubes negras los distintos urbanismos de la ciudad dormitorio. Se hace evidente y se denuncia públicamente que la gestión municipal es ausente y opaca, informando que se ha limitado el acceso a la información pública fundamental, teniendo en secreto hasta las gacetas municipales y las ordenanzas vigentes. En el caso de la basura, la queja principal es la inexistencia de un servicio de gestión y recogida de desechos, por lo cual estos se han venido acumulando en montañas, las cuales son quemadas por particulares, quienes intentan acabar con esta acumulación indeseada. Asimismo, se tocó la problemática, que parece ser común a todas las ciudades, de las talas descontroladas y podas exageradas y sin criterio técnico.

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También se habló de la situación del agua, de la contaminación del río, el cual emite un hedor en sus cercanías, especialmente en horas de la tarde, cuando todos llegan cansados del trabajo desde Caracas. Se conversó  también sobre el sitio donde realizamos el evento, el Parque José María Cartaya y su especial ecosistema conformado por una laguna, la vegetación y una interesante fauna de aves migratorias, acuáticas y hasta babas; el cual, de acuerdo algunos vecinos, fue declarado parque municipal, aunque sin poderse constatar en las facetas por su falta de publicación. Este se ha visto amenazado por ambiciones particulares que han intentado convertir el espacio en un lugar para eventos nocturnos con música a alto volumen y construcciones comerciales, que en los momentos en que se han realizado intentos de hacerlo, provocaron la muerte de aves. Por eso, los habitantes de Nueva Casarapa buscan organizarse y requieren de asistencia jurídica para constituir una figura protectora que evite el avance de esta visión mercantilista sobre el humedal y parque en el cual encuentran tranquilidad, calma y convivencia con otras formas de vida.