Por: Erick Camargo (Corresponsal OEP)
Para Observatorio de Ecología Política de Venezuela
Desde inicios de mayo, se ha reportado protestas de comunidades de Maripa, en el municipio Sucre del estado Bolívar, en contra de la instalación de nuevas plataformas para la explotación minera en el Río Caura, de acuerdo con reportes de la organización Kapé Kapé.
Los vecinos de Maripa denuncian como se ha venido degradando las aguas de uno de los ríos más importantes del país. De acuerdo con el reporte levantado en el sitio por la organización Kapé Kapé, los vecinos de Maripa marcharon desde inicios de mayo en protesta contra la instalación de balsas mineras de alto cilindro y la situación precaria de los servicios públicos y la concentración de esfuerzos y recursos para mantener activa la minería en la región.
“Nosotros estamos muy tristes, preocupados y amenazados por la construcción e instalación de seis balsas mineras de alto cilindro”, estas estructuras se están levantando en el puerto de Maderas del Orinoco, cerca del campamento turístico Wasaña, explicó Quilio Carpio, habitante de la localidad a Kapé Kapé.
El 16 de mayo el diputado Américo De Grazia difundió un video en el que habitantes de Maripa denunciaban el impacto socioambiental de la instalación de estas balsas mineras en el Río Caura.
Desastre en #RioCaura inquieta a los ciudadanos de #Maripa. Régimen destruye el 3er Río más grande de Venezuela. Afluente del Orinoco. Balsas explotando oro y diamante. Sembrando terror y envenenamiento de agua. @SOSOrinoco @mbachelet @Almagro_OEA2015 @provita_ong @ecopracticas pic.twitter.com/G5XhUEFVum
— Americo De Grazia (@AmericoDeGrazia) May 16, 2020
Este 23 de mayo un grupo de manifestantes salió a las calles de Maripa para exigir a la alcaldesa Zoraida Valor el cese de operaciones de una balsa minera que extrae oro y diamantes la misma pertenece al arco minero. Los habitantes amenazaron con voltear la balsa sino le cumplen con sus necesidades básicas.
Asimismo, reclamaron a la primera autoridad civil del municipio Sucre, la activación del servicio de agua potable, gas domiciliario y gasolina.
La activista Susana Raffalli también denunció en su cuenta en Twitter que Balsas con maquinaria hidráulica pesada se disponen a dragar el lecho de El Caura. Ese daño no acaba cuando el Estado agote la mina. Le están dragando la vida a piaroas, kari’ñas y ye’kwanas.
Balsas con maquinaria hidráulica pesada se disponen a dragar el lecho de El Caura.
Ese daño no acaba cuando el Estado agote la mina.
Le están dragando la vida a piaroas, kari'ñas y ye'kwanas.— susana raffalli a (@susanaraffalli) May 26, 2020
La denuncia de la instalación de balsas mineras en el Río Caura se enmarca en la reciente publicación en Gaceta Oficial N° 6.526 la Resolución N° 0010 que como señala Cesar Romero, del Equipo de Investigación de @CERLAS (Centro para la Reflexión y la Acción Social), contempla la ejecución de minería fluvial en la “Zona de Desarrollo Estratégico Nacional Arco Minero del Orinoco” (AMO) para la extracción de oro, diamantes y demás minerales estratégicos en áreas determinadas en la resolución.
Esta habilita a la Corporación Venezolana de Minería (CVM), o las filiales que ésta designe, para el desarrollo de minería fluvial en ciertas áreas de importantes ríos de la Guayana venezolana como son, Cuchivero, Caura, Aro, Caroní, Yuruari y Cuyuní, los cuales son todos afluentes del río Orinoco, con excepción del Cuyuní que drena hacia el río Esequibo. Tal explotación minera se realizaría en áreas de estos ríos, definidos con coordenadas geográficas en la citada resolución y permitiría la extracción por medio de embarcaciones o balsas.
Falta de combustible en zonas mineras mientras se garantiza gasolina para quienes explotan las minas
En los últimos días se han realizado denuncias reiteradas sobre la gran cantidad de gasolina que es distribuida en las regiones mineras directamente a actores vinculados a esta actividad extractivista, mientras que para las comunidades de estas zonas, y para buena parte de la población en el resto del país, la escasez se agudiza cada día más. Los sitios más resaltantes en las denuncias han sido Icabarú en la región circundante de Santa Elena de Uairén y en Maripa, en la región del bajo Caura.
Entre estas denuncias podemos destacar la que realiza SOS Orinoco sobre tambores de gasolina llevados a Icabarú y aviones trabajando en la región, para mantener activa la minería, en medio de la pandemia y la cuarentena.
Mientras en Caracas y otras ciudades el narco-régimen de @NicolasMaduro pone a la gente a esperar 3 días por gasolina, en Icabarú diariamente llegan tambores de gasolina y 3 aviones para que no se detenga la minería de #OroDeSangre @AmericoDeGrazia @mbachelet @Almagro_OEA2015 pic.twitter.com/vcWntbqmWL
— SOS Orinoco (@SOSOrinoco) May 19, 2020
También a través de la publicación de videos en sus cuentas en redes sociales, el diputado del estado Bolívar Américo De Grazia ha informado sobre la agitación existente en el pueblo de Maripa, capital del municipio Sucre de dicho estado, en relación con la falta de combustible. Destacan los habitantes de esta zona el contraste con la distribución sin fallas para las lanchas y maquinaría de la minería en la cuenca de dicho río, que es territorio perteneciente a un Parque Nacional.
#MaripaProtesta por falta de Agua, Gas y Gasolina. Pero si hay balsas para explotar El Oro y diamante en el Río Caura. Aquí enfrentan a la Alcaldesa Zoraida Valor, disfrazada de Militar. El pueblo amenaza con voltear las balsas minera del Arco Minero. @SOSOrinoco @VEinformativa pic.twitter.com/YjlmlfF0IT
— Americo De Grazia (@AmericoDeGrazia) May 23, 2020
En este caso, la alcaldesa, asistió a una manifestación de ciudadanos vestida de militar, intentando disuadir a los habitantes que amenazaron con volcar las lanchas de los mineros.
Estas denuncias se han aunado a los crecientes reportes de fallas constantes en los servicios básicos, electricidad, agua potable y gas doméstico, que afectan la vida cotidiana de las comunidades de la región, ya dramáticamente restringida por la cuarentena decretada por el gobierno venezolano como forma de abordar la pandemia de Covid-19.
Un dirigente de La Causa R, José Márquez, declaró al Correo del Caroní que “La gente anda a pie, eso está afectando la siembra, la pesca, la movilidad, la salud. Con el tema de la comida, la gente está carente de alimentos; en cuanto a electricidad, pasamos tres y cuatro días sin electricidad; y con el gas, la gente volvió a la prehistoria, a andar en burro y cocinar con leña porque no hay suministro de gas, y esto ha llevado a un clima de desespero”.
“En Maripa, en el río Caura, construyeron una balsa para dedicarla a la minería y la gente se niega a que la balsa inicie operaciones porque es contaminar más el río. Además, donde está esa balsa hay una gran cantidad de lagunas que son criaderos de pescados que se verían afectados. La gente solicita al ejecutivo municipal el retiro de la balsa”, explicó Márquez.
La alcaldesa había prometido reunirse con los vecinos el día lunes, pero al amanecer del mencionado día, el pueblo amaneció militarizado y fue cuando esta apreció vestida con traje militar. No se llegó a ningún acuerdo y los vecinos han amenazado con volcar las balsas mineras.
Minería avanza también en Guyana
Creemos importante señalar que mientras esto sucede en Maripa, en Guyana, específicamente en el Territorio Esequibo (reclamado por Venezuela), el gobierno de ese país declaró que la minería era un “servicio esencial” por lo cual no debe suspenderse en la cuarentena y debe tener prioridad con los recursos enviados a la región; esto ha provocado igualmente protestas en la población de las localidades afectadas por estas actividades, que señalan una avance de la minería ilegal. No es un problema que únicamente afecta a Venezuela, sino que es un problema regional, vinculado al avance del extractivismo a nivel mundial.